Ni le dio tiempo a terminar la frase, porque le enseñe las dos jeringas que llevaba en la mano y que la tipa no habia visto.»….aquí la llevaba precisamente, así que ya se puede usted comer la mierda »
«….¿como que Niño ? querrá decir Enfermero»
Estas son las dos frasesitas que se me pasaron por la cabeza, era muy temprano (9:00h) para emezar a «educar» familares, asi que lo deje pasar con idea de no complicarme la vida. La mañana en un servicio desconocido puede ser horrible si tienes que lidiar con familiares que ya vienen con la escopeta cargada dos veces.
Debo de reconocer que mis clases sobre «Habilidades de información y comunicación al usuario» me frenan a la hora de tomar una postura agresiva, pero aunque sea duro decirlo esta es la única postura que entienden alguna personas.
De la frase que salió de boca de la señora, lo que más me irritó no fue que me recordara que su madre tenía que inyectarse insulina, sino el «Niño» ¿ Acaso no hay más formas de dirigirse a alguien para llamar la atención ? . Qué pasa con el » Perdone… » » Oiga…» » Usted lleva la cama…? » » ¿ Quién es el Enfermero de…?»
Yo no le llamo » Niño/a « a nadie, siempre le hablo a las personas de usted, ¿ Por qué la gente no hace lo mismo ? Atrás quedaron aquellos años en que al Practicante se le llamaba de Don.
Permitir frases como estas nos lleva a lo que tenemos en la actualidad: Una profesión poco reconocida socialmente, obsesionada por un cambio de nombre ( ahora somos enfermeros) y no preocupada en absoluto por hacerse respetar.